Sibila Camps

EL ANTECEDENTE. En diciembre de 2013, la Corte Suprema de Justicia de Tucumán resolvió el recurso de casación presentado por la querella y por los fiscales, y encontró culpables de secuestrar y prostituir a Marita Verón a 10 de las 13 personas que habían sido juzgadas y absueltas un año antes. "Liliana" Medina había muerto en mayo. En cuanto a los hermanos María Jesús y Víctor Rivero --acusadosde haber ordenado y ejecutado el secuestro, respectivamente--, la Corte ratificó las absoluciones.

LA NOTICIA. El lunes 11 de febrero venció el plazo para presentar un recurso extraordinario de queja ante la Corte nacional --el que debería ser habilitado, o no, por la Corte tucumana--; pero ni la querella ni los fiscales hicieron ninguna presentación. Era la última oportunidad de apelar la absolución de los Rivero.

"La Gaceta" titula: "Trimarco consiente la absolución de Rivero" (así en singular). Y en el cuerpo de la nota, interpreta: "Trimarco se dio por vencida en la causa de 'Marita'”. En la versión digital, esa nota no incluye ninguna fuente de la querella, ni del Ministerio Público Fiscal; la voz de la querella está en un recuadro aparte, pero en la nota principal no hay ningún enlace que permita descubrirlo (lo encontré por casualidad, buscando otra cosa). Quienes leemos la edición digital, sólo veremos que tanto el título como parte del contenido de la nota --en especial esa parte-- son engañosos y tendenciosos: a decir verdad, a través de esa nota no hay modo de saber si Trimarco consiente o se dio por vencida, porque no fue consultada. Además, aún falta dictar las penas de los 10 condenados. Y ya pasaron casi dos meses desde la decisión de la Corte.

En lo personal, ya desde enero sabía que la querella no iba a apelar esta decisión del fallo. El doctor Carlos Garmendia me informó que el recurrir ante la Corte nacional por los Rivero implicaría frenar el proceso de condena ya efectiva contra las otras diez personas, con lo que la impunidad sería absoluta y se prolongaría vaya a saberse por cuántos años más. Vale la pena recordar que el 3 de abril se cumplirán 12 años del secuestro de la joven.

La madre de Marita fue informada de todas las alternativas, y decidió concentrarse en las diez personas ya condenadas. Sus abogados pidieron --ya en diciembre-- su inmediata detención, por peligro de fuga, pero no recibieron respuesta de la Sala II de la Cámara Penal. Insistieron y reclamaron la habilitación de feria judicial durante enero, ya que se trata de la solicitud de una medida cautelar; pero hasta ahora, el silencio es total. Esto significa que el día en que los diez condenados sean convocados a escuchar cuántos años tendrán que pasar en la cárcel, vaya a saberse cuántos de ellos se presentarán de manera voluntaria, con el bolsito en la mano.

"La Gaceta" indica que sus abogados defensores sí presentaron recursos extraordinarios, pero no informa qué es lo que objetaron. Una de las objeciones fue lo que intentaron hacer pasar por prejuzgamiento de uno de los vocales de la Corte (Antonio Estofán), un asunto sobre el cual la justicia tucumana ya se expidió en todas las instancias. Lo cuento en detalle en mi libro La red. La trama oculta del caso Marita Verón, ya que los defensores se habían basado en otra manipulación del principal diario de Tucumán, a partir de una entrevista televisiva de un canal porteño.

Recién en el último párrafo de la nota de hoy se recuerda que María Jesús Rivero y su ex pareja Rubén Eduardo "La Chancha" Ale fueron detenidos antes de las fiestas, con prisión preventiva, por orden de la justicia federal, en una causa por lavado de dinero y defraudación al fisco. La redacción de la nota busca atribuir la detención a una venganza de Susana Trimarco, pero no brinda ninguna información. Una nota anterior habla de "su exigencia iracunda de justicia", como si el estado natural de la Justicia fuera la impunidad.

Sí es cierto que esa causa se inició a partir de una denuncia de Trimarco. Varias de las pruebas presentadas, fueron declaraciones de testigos durante el juicio, que relacionaron a ambos con la trata sexual en Tucumán y en La Rioja; y también de la ahora condenada Daniela Milhein. Testimonios que ni siquiera fueron mencionados por el tribunal en su fallo de 2012, pero que sí constan en las actas del juicio, aunque en forma incompleta.

De la quincena de notas publicadas por "La Gaceta" sobre esta nueva causa por lavado de activo y otros delitos, sólo dos brindan alguna --escasa-- información acerca de las pruebas con las que el juez federal Fernando Poviña dictó las preventivas. Las restantes, se ocupan sólo de los lugares y de las circunstancias de detención de Ale y de Rivero; y tres notas incluyen cartas de Rivero, de su hijo Ángel Ale, y de su hermano Víctor Rivero. La última nota que da alguna información sobre los delitos, es del 31 de diciembre.

Nada se dice acerca de otro de los detenidos, Fabián González; ni menos de los dos prófugos, Víctor Alberto Suárez y la actual pareja de Rivero, Oscar Roberto Dilascio (ex director técnico de San Martín de Tucumán, club del que "La Chancha" fue presidente, y María Jesús, vicepresidenta). Nada se dice ni se dijo tampoco sobre los demás procesados y procesadas en esa causa, incluido el hermano de "La Chancha", Angel Adolfo "El Mono" Ale, y miembos de la familia de ambos, acusados de ser testaferros.

El auto de procesamiento y dictado de preventivas tiene 272 páginas y está en internet. Allí hay información de sobra para hacer una serie de, al menos, una semana de notas.